A Luis Ángel Pérez le tocó trabajar esta Navidad. No pudo degustar las típicas cenas familiares, pero sí paladear una experiencia de primer nivel: formar parte del rodaje de una película que ya ha hecho historia antes de su estreno. Fue quizá la forma figurada de saldar una deuda, la que una legión de cinéfilos (especialmente de provincias) tienen contraída con el director José Luis Garci por hacer accesibles los grandes clásicos del séptimo arte a través del recordado programa de televisión ‘¡Qué grande es el cine!’. Admirador tanto de su filmografía como de su faceta divulgadora, este director de fotografía con raíces bercianas pudo ahora trabajar codo con codo con el realizador madrileño e influir en cuestiones claves de ‘El crack cero’, el regreso a la gran pantalla del detective Germán Areta.

Luis Ángel Pérez (a la derecha), en un momento del rodaje de ‘El crack’ junto a José Luis Garci

Carlos Santos (izquierda) sustituye a Alfredo Landa como Germán Areta
Luis Ángel Pérez puso su sello en dos documentales con mucho ADN Bierzo, ‘Paisajes interiores’ y ‘Ancestral Delicatessen’, ambos de Gabriel Folgado
Garci ya hizo a uno de los personajes centrales de ‘El crack’ vecino de Ponferrada. Sin saberlo, casi cuatro décadas después, la precuela que supone su vuelta a la dirección también tiene también una conexión berciana, la que aporta Luis Ángel Pérez López, un alicantino de nacimiento que pasó los primeros veranos de su vida en el pueblo de su madre, Sésamo, donde todavía conserva familia. Fue ese vínculo el que le animó a hacer la prueba de acceso a la Escuela de Cine de Ponferrada y matricularse en su segunda promoción (2002-2005). Comenzó viviendo en casa de sus abuelos en Sésamo hasta que, para evitar levantarse todos los días de madrugada por el déficit de líneas de transporte público, se trasladó a la capital de la comarca, donde confirmó una vocación labrada desde la infancia con un padre cinéfilo. Luego puso su sello en dos documentales con mucho ADN Bierzo, ‘Paisajes interiores’ y ‘Ancestral Delicatessen’, ambos del cineasta de Albares de la Ribera (Torre del Bierzo) y compañero de clase Gabriel Folgado.
‘Paisajes interiores’, la historia de una familia con tres generaciones de mineros, fue “una gozada”, una forma de aproximarse a la profesión de su abuelo y dejar en imágenes testimonio de una actividad que ha condicionado “para bien o para mal” la estética y el devenir de una comarca con mucho sentimiento de identidad. “Los bercianos, los catalanes y los gallegos tienen un gran amor por su tierra”, dice Pérez, que también rodó junto a Folgado ‘Ancestral Delicatessen’, que cuenta el proceso de otra tarea tradicional como la recogida de las castañas hasta su comercialización como producto gourmet en una confitería de París en una cinta en blanco y negro.
Precisamente el blanco y negro era el planteamiento de partida de José Luis Garci para el rodaje de ‘El crack cero’, la tercera entrega de una saga de referencia del cine negro español que retrocede en el calendario tras ‘El crack’ (1981) y ‘El crack II’ (1983) para situarse en el Madrid de 1975. Pero la primera idea del director era marcar un punto de inflexión en el curso de la película para hacer una sutil transición hacia el color. ¿Qué opinas?, le preguntó a Luis Ángel Pérez, que le contestó “no sólo como director de fotografía, sino también como cinéfilo”: “Al leer el guión me imaginé la película en blanco y negro”. La elección final por esta fórmula es también un aliado a la hora de reproducir el Madrid de la época hasta deparar una cinta con aroma a cine clásico, una de las señas de identidad de un director diferente que marca unos “ritmos ideales para disfrutar del rodaje”.
“Al leer el guión me imaginé la película en blanco y negro”, le dijo a Garci cuando le planteó la idea de hacer una sutil transición hacia el color en el regreso a la pantalla de Germán Areta ambientado en 1975
Pérez, que tiene que lidiar en el día a día con los tiempos frenéticos que imponen otros formatos como los publicitarios, ha vivido una “experiencia única”, reconoce en conversación telefónica a mediados de abril, en su último día de trabajo en ‘El crack cero’. El trato con Garci fue “muy cordial” desde la primera toma de contacto, en la que afloraron títulos y tendencias de referencia para “dos cinéfilos con muchos puntos en común”. Y el rodaje le ha confirmado la idea de que el madrileño es un “grandísimo director de actores” en un trabajo en el que el Carlos Santos (el agente Povedilla de ‘Los hombres de Paco’) sustituye al gran Alfredo Landa como protagonista.
Ahora que desde hace un par de años ha retomado el contacto con El Bierzo por medio de alguna escapada, Luis Ángel Pérez no oculta su preocupación por el futuro de una tierra que tampoco acabó por encontrar en la Escuela de Cine una de las ansiadas alternativas al monocultivo del carbón. “La Escuela fue una operación política. El problema no era el profesorado, sino que se hizo una pésima gestión. Y eso lo sabíamos los alumnos”, concede este director de fotografía que ha puesto una cuota de protagonismo del Bierzo en una película llamada a reescribir la historia del cine negro en España.
El trato con Garci fue “muy cordial” desde la primera toma de contacto, en la que afloraron títulos y tendencias de referencia para “dos cinéfilos con muchos puntos en común”

En primer término, con Gabriel Folgado en el rodaje en París de ‘Ancestral Delicatessen’

En el rodaje en París de ‘Ancestral Delicatessen’

En el rodaje en El Bierzo de ‘Ancestral Delicatessen’

En el rodaje en El Bierzo de ‘Ancestral Delicatessen’

A la derecha, con el equipo de rodaje de ‘Ancestral Delicatessen’

En primer término junto a Gabriel Folgado en el rodaje de ‘Paisajes interiores’

En primer término junto a Gabriel Folgado en el rodaje de ‘Paisajes interiores’

En primer término junto a Gabriel Folgado en el rodaje de ‘Paisajes interiores’

En el rodaje de ‘Paisajes interiores’

En primer término junto a Gabriel Folgado en el rodaje de ‘Paisajes interiores’

Luis Ángel Pérez es el director de fotografía de ‘El crack cero’